Barsuk Records se está convirtiendo poco a poco en su sello de referencia para la buena música. De ser el sello que editaba los discos de
Death Cab For Cutie, han pasado a ser los repsonsables de la edición de algunos de los mejores discos de los últimos años. Ellos son los responsables de que John Roderick y sus
Long Winters nos entregaran en 2004
When I pretend to fall (un manual de por rock clásico). También es culpa suya que las dos últimas maravillas de
Nada Surf hayan llegado a nuestros oídos, además de permitir a
Jim Noir hacer ese sinfonía pop que es
Tower Of Love, o de mostrarme la bella y enigmática música del último disco de
Jesse Sykes & The Sweet Hereafter.
El sello musical está en racha, y ahora nos presentan el segundo disco de
Menomena.
Friend and Foe no se parace en nada a ninguna de las bandas anteriormente mencionadas. El único referente actual al que se pueden parecerse un poco serían
Animal Collective, pero suenan completamente disitintos. Donde los animales optan por la electrónica, el loop vocal, la onomatopeya, el ritmo tribal y la alegría;
Menomena suenan rotos, descaharrantes y con guitarras minimales, baterías que lo cubren todo , pianos rítimico e arreglos imaginativos (¡qué vientos más curiosos se pasean por
Airaid!) y melancólicos. Pero ambos tienen un gusto por la melodía increible.
Menomena suenan a música electrónica hecha con instrumentos acústicos.
En
Friend and Foe no se entra facilmente, se necesitan unas cuantas escuchas para empezar a comprender el embrujo y la belleza que inunda este disco. Denle un oportunidad.
Mención aparte merece la portada del disco. No solo porque este diseñada por
Craig Thompson, autor de
Blankets, sino también por el gran diseño de la misma, y la infinitas posbilidades de diversión que ofrece junto con el disco. Sólo por la portada merecería la pena comprarse el disco, pero el contenido del mismo lo merece aun más.